El abanico dominicano



Preciado artefacto que nunca falta en el hogar dominicano. Ricos o pobres todos tienen uno. Los hay de techo, de pared, de mesa y de pedestal y hasta la versión miniatura del carro de concho.
Es conocido comúnmente como el helicóptero, aireacondicoplado, el decapotao, espantamosquitos y el echabrisa.
El abanico tiene diferentes usos. Lo veremos enfriando una sopa del que no come caliente, en los pies del macho de la casa comiendose un sancocho sin camisa, en la cabeza de una doña en rolos que no picó pal' salón y como secador de uñas recién pintadas.
Todos tienen una historia de dicho equipo. A alguien le cayo uno de techo sobre la cabeza, otros tienen un hermanito que metió un deo' de curioso y rieron todos menos el.
El abanico es lo que mas se daña. A los tres días deja de girar, se queda fijo. Hay que quitarle la parrilla de a'lante ponerlo en el 3 y darle par de vueltas para que arranque. La mayoria de veces se "decocota" y hay que amarrarle un hilo para que se quede fijo. Y si te lo reparan lo dejan que da corriente hasta en los plásticos, con un ruido mas molesto que el del mosquito y un olor a cable quemao'.
Aunque eche brisa caliente, y estemos en pleno verano, no hay nada como un " helicoptero" si para un aire no te dan los cuartos.

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